Cristología Del Nuevo Testamento: Jesucristo Es El SeñorMuestra

El mensaje de Jesús: el Reino de Dios (Primera parte)

Al descubrir la importancia de los discursos y las actividades de Jesús en el desarrollo de la cristología del Nuevo Testamento, debemos tomar muy seriamente en consideración el tema del Reino de Dios. Desde la perspectiva histórica es incuestionable que el tema recurrente y más importante de Jesús de Nazaret era el Reino de Dios o de los cielos; y desde la dimensión teológica, ocupa el sitial prioritario.

El Reino, para Jesús de Nazaret, era la manifestación extraordinaria y concreta de la soberanía divina en medio de la historia. Y esa revelación del Dios Soberano no solo tenía importancia en la vida y las acciones del joven rabino galileo, y también en la comunidad que lo rodeaba, sino que llegaba al futuro, a las dimensiones escatológicas. Esas compresiones teológicas fueron alimentando el desarrollo de una cristología de autoridad y poder.

Las palabras “reino”, “reinado”, “gobierno” e “imperio” transmiten ideas básicas que se relacionan con poder y dominio. El concepto incluye también las esferas semánticas de la autoridad y la potestad. En los Evangelios canónicos se utiliza la expresión como en un centenar de ocasiones. La gran mayoría de las veces, el término alude al Reino de Dios, aunque en Mateo ese concepto se presenta como Reino de los cielos, para evitar la posibilidad de usar el nombre de Dios en vano.

Este singular tema del Reino en las enseñanzas de Jesús, por alguna razón, no aparece con frecuencia en el resto del Nuevo Testamento ni se explora con intensidad en los escritos de las primeras comunidades cristianas.

La cristología del Nuevo Testamento se fundamenta en gran parte en la enseñanza del Reino, pues ubica a Jesús en una cercanía especial con el Dios de la Biblia hebrea. Y esa cercanía inspiró a los teólogos neotestamentarios en la comprensión y explicación de las implicaciones redentoras y liberadoras del mensaje de Jesús a través de la historia.

La cristología del Nuevo Testamento se fundamenta en las enseñanzas y actividades de Jesús de Nazaret. Y su teología del Reino juega un papel fundamental en las comprensiones que desarrollaron sobre el Señor las primeras comunidades cristianas. ¡Jesús de Nazaret anunciaba la llegada del Reino de Dios! Y en un momento de crisis política, social, económica y espiritual, esa enseñanza constituyó un elemento extraordinario de esperanza y futuro.