El Novio ApasionadoMuestra

En el versículo de Cantares 1:2, vemos la declaración de que el amor del novio es mejor que el vino. El vino, en la cultura bíblica, a menudo se asocia con la celebración y la alegría. Comparar el amor con el vino es destacar su pureza, alegría y la satisfacción que trae. Sin embargo, el amor que Salomón describe va más allá de esas cualidades terrenales. Señala un amor que es esencialmente superior y más gratificante.

Este amor refleja la esencia del primer y mayor mandamiento que Jesús menciona en Mateo 22:37-38:
“Jesús respondió: ‘Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente’. Este es el primero y más importante de los mandamientos".

El amor a Dios debe ser la base de toda nuestra vida, el fundamento de nuestra pirámide espiritual. Debemos pedir en oración que el Señor derrame sobre nosotros ese amor divino, un amor que nos capacite para amarlo con todo nuestro ser. Ese amor es el primer mandamiento y es la esencia de la relación que Dios desea tener con nosotros.

También es importante comprender que este primer mandamiento será aún más profundo y verdadero en nuestros corazones a medida que nos acerquemos al regreso de Cristo. El amor de Dios derramado en nuestros corazones nos prepara para Su venida y nos fortalece en nuestra jornada espiritual.