El Amor tiene NombreEjemplo

Emanuel Dios con Nosotros

Mateo 1:23

A menudo encontramos a muchas personas cerca de la cruz pero lejos de Cristo. La religiosidad ha querido interponer un camino distante entre Dios y las personas, ofreciendo un vínculo con lo divino por medio de tradiciones y actos rutinarios.

Dios nos brinda una amistad cercana y cotidiana por medio de su hijo Jesucristo. Precisamente cuando estudiamos en profundidad el significado de Emanuel encontramos que se describe tal y como Él es: cercano a nosotros, presto a escucharnos y guiarnos en nuestro diario vivir, siempre y cuando le permitamos, con sinceridad, actuar en nuestro corazón. ¿Cómo preparas tu corazón para cultivar una relación con Dios?

Dios creó a la humanidad para tener una relación de intimidad con ella, pero a causa de nuestra manera particular de ser nos distanciamos de Él; y entonces, cuando sentimos la ausencia de Su presencia comenzamos una carrera desesperada por construir puentes para volver a Dios, puentes que desencadenan un sinnúmero de rituales y actos disfrazados de espiritualidad que terminan en intentos fallidos por rescatar esa relación de intimidad.

Aún así, Dios en su infinito amor envió a su Hijo Jesucristo, para que al hacerse como nosotros, nos enseñara la manera de vivir en intimidad con nuestro Creador. Es por esto que recibimos a Emanuel: Dios con nosotros.

Emanuel Dios con nosotros es Jesús convirtiendo el agua en vino, sanando leprosos, resucitando a Lázaro, calmando la tormenta, liberando a los cautivos, dando vista a un ciego, multiplicando los peces y los panes; Emanuel Dios con nosotros es Jesús muriendo en la cruz por amor a tí, a mí, a la humanidad.

Recuerda

1. La religiosidad es una simulación disfrazada de solución, es un camino maquillado lleno de espejismos que confunden a la humanidad para que se conduzca por múltiples caminos, que cuanto más se recorren, mayor es la distancia que generan entre el hombre y Dios. Mateo 15:8
2. El nominalismo religioso hace que vivamos nuestra fe por tradición y no por convicción. Jesús vino a estar con nosotros y entre nosotros, es nuestro amigo. Evaluemos cómo está nuestra relación de intimidad con Él y sin importar el resultado, hagamos un compromiso real con Jesús, Dios con nosotros.

Hoy nuestro Emanuel nos muestra su amor en Jeremías 29:12-13 “Entonces ustedes me invocarán, y vendrán a mí en oración y yo los escucharé. Me buscarán y me encontrarán, porque me buscarán de todo corazón”.