Tiempo con Dios en cuarentenaEjemplo

«Somos hijos suyos»

Hoy quiero compartir tres hechos que revelan que Dios quiere entablar una relación íntima con vosotros. Para ello, podemos leer Efesios 1.

PRIMERO, Dios nos ama (v.4). Desde el principio de los tiempos y antes de la creación del mundo, ya fuimos concebidos y amados. No somos un producto en masa, Dios siente un especial afecto por cada uno de nosotros, por todas sus criaturas sin excepción. Tanto nos ama que dio su vida por cada uno de nosotros. A pesar de ello, erróneamente la humanidad trata de redefinir el amor a su conveniencia. No hemos logrado nada, pues esa tarea corresponde exclusivamente a Dios, quien es amor y nos amó primero.

SEGUNDO, Dios nos eligió (v.4). Mediante el sacrificio de Jesús, todos aquellos que lo aceptan y lo hacen su señor fueron elegidos por Dios, no únicamente para ser salvados y llegar al cielo, sino que Dios está construyendo un pueblo que viva en santidad con quien poder vivir por la eternidad. Recuerda, no hemos sido elegidos para vivir como queramos, sino como Dios quiere que vivamos. Este privilegio para nada debe ser considerado una recompensa, sino un regalo inmerecido. Por lo cual, tu postura debe ser siempre la humildad y gratitud eterna hacia Dios.

TERCERO, Dios nos adoptó (v.5). Por medio de Jesús fuimos adoptados en la familia de Dios. Mediante la adopción tenemos parte con Dios. Jesús se volvió el único camino para llegar a Dios y nuestra escalera al cielo. Sin embargo, lo más bello de todo es que Dios se goza profundamente en hacernos hijos suyos.

Ahora que tenemos el privilegio inmerecido de llamar a Dios nuestro amado Padre, te invito a buscarle siempre a Él, su protección, su consuelo y su paz, aún en tiempos difíciles como el covid-19. Pon tu confianza en tu Padre celestial, quien siempre hará lo correcto por sus hijos, aunque a veces nos cueste entender sus decisiones; debes saber que Él, a quien ama, corrige (Proverbios 3:12).