Un Espíritu CorrectoMuestra

Día 7: Espíritu Agradecido

Un espíritu agradecido es la base del gozo y el contentamiento. Una vida de gozo no viene por tener sino por ser agradecido. Como en todas las características de un espíritu correcto, el espíritu agradecido no se puede fingir o forzar para tener, pues si se finge, no vendría del interior y pronto acabaría. Primero hay que eliminar el espíritu contrario que es el espíritu de la ingratitud, de la queja y así, darle espacio a Dios para que inserte en nosotros el espíritu de gratitud. 

Aquellos que portan el espíritu de gratitud disfrutan de una vida placentera, positiva, llena, satisfecha y alegre, y como todo espíritu, cambian la atmósfera donde van y la hacen más placentera.
Un espíritu de gratitud abre puertas, atrae bendiciones, en todo tiempo se regocija, conmueve el corazón de Dios y multiplica lo que tiene en las manos. 

Por el contrario, una persona con un espíritu de ingratitud o queja, vive en la oscuridad, siempre viendo lo que le falta, comparándose, en queja continua, se enferma, la gente no quiere estar cerca a esa persona, vive con un sentimiento de insuficiencia, de enojo y amargura. 

El espíritu de gratitud tiene un lado profético en el cual se regocija y da gracias aún por lo que está por venir sin saber cómo será. Como dice el versículo de hoy, no se preocupa, sino que más bien es agradecido. 

Dinámica: 

- Has una lista de todo por lo que estás agradecido y dale gracias a Dios. 

- Pide perdón a Dios por tu ingratitud y pídele que te dé un espíritu agradecido.