Las Buenas Noticias De Dios - Parte 1Muestra

¡Buenas noticias! Jesús es más importante que el “yo” 

¿Recuerdas al Bautista? Pues bien, hoy lo tendremos nuevamente en escena y nos enseñara una lección muy importante.  

Versículos 22 al 25: Observa que Juan nos dice que Jesús con sus discípulos y el Bautista, concurren en la misma practica de bautizar a la gente, y analiza que los discípulos del Bautista discutieron con otros judíos acerca de una ceremonia de purificación, quizás porque los judíos se bautizaban varias veces al año para purificarse, algunos incluso se sumergían muchas veces por bautismo; en cambio Juan el Bautista tenía un pensamiento diferente, el practicaba un solo bautismo y era más que una ceremonia de purificación, la gente que lo hacía debía  hacerlo con un corazón arrepentido, con una actitud de cambio sincero.  

Versículos 26 al 30: Motivados por la discusión, los discípulos del Bautista se acercan a decirle que Jesús también estaba bautizando y que todos se iban tras él. Los discípulos del Bautista quizás estaban preocupados al ver que el número de seguidores de su maestro cada día era inferior, pero el Bautista no se enojó por eso, ni se preocupó, al contrario, les regalo una gran enseñanza.  

El Bautista reconoce que fue enviado antes que Jesús solo para prepararlo todo para su llegada, de la misma manera que el amigo del esposo se encarga de ayudarle con los preparativos de la boda. El amigo del esposo puede ayudar a organizar la fiesta, recibir a los invitados, entre otras cosas, pero a quien realmente espera ver la gente y sobre todo la novia, es al esposo, pero aun así el amigo se siente feliz, por eso el Bautista no estaba enojado cuando Jesús comenzó a tener más seguidores que él, el Bautista se sentía feliz porque había cumplido con su misión, él sabe que ha llegado el momento de hacerse a un lado, por eso les dice: “Es necesario que él crezca, pero que yo mengue” (V. 30), en otras palabras, Jesús debe brillar cada vez más, mientras que el “yo” debe ir quedando en la sombra. En nuestra vida, Jesús debe tener cada vez más importancia, y nosotros tenerla menos. 

Versículos 31 al 36: El Bautista continua su discurso explicando tres razones por la que Jesús es más importante que él, la primera, porque Jesús viene de arriba y habla de lo que ha visto y oído en el cielo, en cambio él es de la tierra y solo puede hablar cosas terrenales; la segunda, porque cuando Jesús habla, el que habla es Dios mismo, porque Dios le ha dado todo el poder de su Espíritu; y la tercera, es porque el Padre ama a Jesús, y le ha dado poder sobre todo el universo. Entonces, si escuchamos a Jesús y creemos en él, reconocemos que Dios dice la verdad y tenemos vida eterna.