Guía Mis Pasos, SeñorMuestra

Indecisos

Una de las situaciones más difíciles en la vida es cuando nos encontramos en medio de una indecisión. Ese momento en el cual no nos sentimos seguros de qué paso dar, de qué camino tomar. Reflexionamos y analizamos, pero la duda nos arropa haciéndonos sentir más indecisos.

Hay asuntos triviales sobre los cuales tenemos que tomar decisiones y que no nos provocan temor a equivocarnos. Son aquellas que tomamos a diario y a las que estamos acostumbrados. Asuntos tales como qué comer, qué color escoger, qué zapatos comprar, etc.

La dificultad en el campo de las decisiones radica en no saber qué es lo mejor, lo más sabio, lo que resultará ser la mejor decisión. Nos pasa porque no conocemos el futuro y quisiéramos saber de antemano cuáles serán los resultados de nuestra decisión.

Aquí es que entra en el escenario la oración, esa herramienta poderosa que nos ha dado Dios para que le consultemos y busquemos su divina dirección. Como vimos anteriormente, el Señor nos dice: “Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos.” Sal. 32:8 Su voluntad es dar dirección a la vida de sus hijos. Dios nos quiere ayudar, Él sabe qué es lo mejor, qué pasos debemos dar. 

Cuando vamos al Señor en oración le estamos dejando saber que solos no podemos, que le necesitamos. Queremos escuchar su consejo, poner nuestras dudas delante de Él, hablarle de nuestra confusión y de lo inseguros que nos sentimos para tomar tal o cual decisión. Él nos escucha, Él nos entiende.

Las decisiones trascendentales, las que están claras como el agua, no deben provocarnos tal indecisión. Dios ha provisto su consejo en las Escrituras y ellas nos dan dirección eliminando la duda de lo que debemos decidir. Asuntos como el camino de salvación, de la justicia, de la verdad, de lo correcto nos han sido revelados. Por eso, tenemos ese versículo tan hermoso que declara: “Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, y él aprueba su camino.”  Sal. 37:23

Todos pasamos por el camino de la indecisión, todos nos sentimos confundidos en algún momento de nuestras vidas. Habrá momentos en que decidamos correctamente y otros en los que no seamos tan acertados. De todos modos, si amamos al Señor y nuestro genuino deseo es hacer su voluntad, no olvidemos las sabias palabras del rey Salomón: “El corazón del hombre piensa su camino; más Jehová endereza sus pasos.” Prov. 16:9