Dime Con Quién Andas Y Te Diré Quién EresMuestra

NO PERFECTOS, PERO CON GANAS DE CRECER.

En el transcurso de la vida conocemos a muchas personas, pero obviamente no le damos la total confianza a aquellos que creemos que no se lo merecen. Llegamos a un punto en el que de manera indirecta despreciamos a los que no están a nuestro “nivel” económico, mental o espiritual. Lo que muchos cristianos no saben es que despreciar a los que son de un “nivel bajo” es antibíblico. En la historia de la humanidad, hubo alguien que decidió juntarse con prostitutas, ladrones, asesinos, violadores y 12 hombres “charlatanes” que eran despreciados por la sociedad. Ese fue Jesús, el mesías libertador; el hombre más sabio que pasó por la tierra.

Muchos quizás dicen: ¿por qué alguien perfecto se reúne con personas imperfectas? Su palabra dice que “bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos. Ni estuvo en camino de pecadores. Ni en silla de escarnecedores se ha sentado” (Sal. 1:1).

El punto interesante de todo esto es que Jesús andaba con personas que a pesar de que eran despreciados por la sociedad y llevaban (algunos) una mala vida, querían crecer espiritualmente. Ahí está la respuesta a una duda que quizás has estado tratando de aclarar en tu vida. No es malo andar con personas que parecen ser “de bajo nivel”, lo malo es poner en práctica sus malos hábitos y andar con personas que no quieren progresar, sino perder el tiempo en este mundo.

He escuchado un montón de veces el típico refrán que dice “el que anda con cojos, al año cojea”, pero nunca he escuchado (a partir de hoy) que “el que anda con cojos tiene la oportunidad de hacerlos caminar bien otra vez”.

Con la frase antes dicha no quiero decir que apoyo el hecho de que debemos andar con malas influencias. Tengo amigos que carecen de una relación estrecha con Dios. Leen la biblia cuando quieren, oran cuando quieren. Otros hasta están fuera del redil, pero eso no quita mis ganas de poder aportar un granito de arena en sus vidas y ellos poder crecer pronto.

Jesús mostró y demostró confianza a 12 hombres que (egoístamente hablando) no se lo merecían por ser pobres mentalmente o llenos de defectos y malos hábitos; pero de algo estoy seguro: aprendían constantemente del maestro. Años después se convirtieron en los 11 (porque Judas lo traicionó y luego murió) mensajeros que han llevado el evangelio por todo el mundo. Hombres de ejemplo, fieles seguidores y amigos de Cristo. Eso no hizo menos al mesías. Al contrario; eso muestra una gran evidencia de que sí podemos ayudar a los cojos para que puedan volver a caminar correctamente.

En resumen, puedes andar con personas de “bajo nivel”, pero con ganas de progresar en cualquier ámbito.

-Richard Paredes.