[La Vida De David] Una Noche De Pasión Se Convierte en Una Vida De DolorMuestra

El camino por el que vas

Cuando leemos 2 Samuel 11, vemos claramente que David se puso en un camino que conducía a la destrucción en el momento en que decidió quedarse en Jerusalén y no ir a la guerra con sus hombres. El camino en el que se encontraba lo llevaría a la destrucción de su matrimonio y a la pérdida de muchas vidas.

No debía estar allí, en su casa, caminando por el tejado del palacio, viendo a Betsabé mientras se bañaba. David estaba transitando un camino; el camino del aislamiento, del interés, de la indagación, de la intimidad y de la implosión. ¿Ves el camino? El aislamiento: Estaba solo en el palacio. Interés: «¿Quién es esa chica?» Indagación: «¿Vas a buscarla por mí?» Intimidad: se acuesta con ella. Implosión: su vida va a dañarse internamente. Ese es el camino que lo llevaría a esta relación adúltera.

David tuvo la oportunidad de salir; sin embargo, no la aprovechó. Cuando se enteró de quién era ella por su sirviente (la esposa de Urías el hitita, uno de sus soldados), pudo haber dicho: «Oh, no sabía quién era. Envíale algo y dile que estamos agradecidos por el servicio de su familia al reino». En lugar de eso, la manda a buscar, porque el camino que estaba transitando lo llevó a permitir que la lujuria se apoderara de su corazón.

El Señor consideró que lo que David había hecho era malo. Dios no quería que tuviera varias esposas. Dios no quería que se encontrara en esta situación en la que envió a un hombre inocente a la muerte y luego se acostó con la esposa del hombre y tuvo un hijo. David debía estar en la guerra, peleando las batallas por el reino. En cambio, eligió el camino equivocado.

¿Estás eligiendo caminar por el camino equivocado porque estás aburrido, porque has dejado de hacer las cosas que se supone que deberías hacer? Caminar por el camino equivocado lleva a la destrucción, tanto de nuestra propia vida como de las vidas de los que nos rodean. Al poner a Dios en primer lugar, confiar en Él y reconocerlo en todo, podemos confiar en que Él siempre nos dirigirá por el camino correcto.