Bástate Mi Gracia: Un Estudio Sobre 2 Corintios 12Muestra
¿Cuál era el aguijón de Pablo?
"Respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí" (2 Corintios 12:8).
“He rogado al Señor, que lo quite de mí”. La oración de Pablo sobre este asunto era apasionada. Nos preguntamos si no se sorprendió cuando la oración no fue respondida ni la primera ni la segunda vez.
La oración inicial de Pablo fue librarse del sufrimiento que le producía este aguijón en la carne. Pablo no era masoquista. Cuando sufría, su primer instinto era pedir a Dios que le quitara el sufrimiento.
Cuando su apasionada y repetida súplica no fue respondida, esto debió preocupar a Pablo y añadió otra dimensión a esta prueba.
· Tenía una dimensión física, ya que era un aguijón en la carne.
· Tenía una dimensión mental, ya que era un mensajero de Satanás.
· Tenía una dimensión espiritual, ya que era una oración sin respuesta.
¿Cuál era exactamente el aguijón en la carne de Pablo? Simplemente no tenemos suficiente información para decirlo con precisión, pero eso no ha impedido que muchos comentaristas y maestros den su opinión.
Algunos lo ven principalmente como un acoso espiritual. Otros piensan que fue persecución. Muchos sugieren que fue una dolencia física o mental.
Cada una de estas sugerencias es posible, pero Dios tuvo un propósito definido al no revelar la naturaleza exacta del aguijón de Pablo. Si supiéramos exactamente cuál era el aguijón de Pablo, entonces todos los que fueran afligidos –pero no exactamente de la misma manera– podrían dudar de que la experiencia de Pablo fuera relevante para ellos. Dios quería que todos los que tuvieran algún tipo de aguijón en la carne pudieran ponerse en el lugar de Pablo.
Invitación: ¿Tus oraciones parecen no tener respuesta? ¡Anímate! Esto también le ocurrió a Pablo. Dios escucha tus oraciones (Salmo 22:24). Advertencia de spoiler: ¡hay una promesa de Dios para ti en la lectura de mañana (2 Corintios 12:9).
Basado en el Comentario Bíblico de Enduring Word de David Guzik.
Acerca de este Plan
Jesús dijo al Apóstol Pablo: “Bástate mi gracia”. ¿Conoces la historia detrás de esa promesa? La vida de Pablo estuvo marcada por dificultades extremas. Este devocional de David Guzik es un comentario de 2 Corintios 12:7-10. Encuentra consuelo y esperanza en la Palabra de Dios, siguiendo el ejemplo de Pablo sobre cómo confiar en Dios en tiempos difíciles. Cobra ánimo porque la gracia de Dios es más que suficiente.
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Nos gustaría agradecer a Enduring Word por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: http://es.enduringword.com/