Viviendo en MisiónMuestra

Viviendo en Misión

En este momento de tu vida, puedes sentir que estás esperando que suceda lo siguiente: cumplir 18 años, conseguir un trabajo, ir a la universidad o mudarse. Pero una cosa que no tienes que esperar es vivir en misión.

Piensa en los lugares en los que Dios te tiene en este momento: eres un estudiante, un amigo, parte de tu familia, miembro de tu iglesia y más. Puedes ser un compañero de trabajo, un compañero de cuarto, un voluntario o un líder escolar. Y aunque hemos pasado mucho tiempo hablando sobre cómo Dios puede usar tus talentos, habilidades, dones y habilidades en esos lugares, lo más importante, a lo que los cristianos están llamados es a amar a los demás como lo hizo Jesús.

Entonces, cuando estés en la escuela, en el campo y pasando el rato con tus amigos, recuerda: vivir en misión realmente significa vivir el amor de Dios. Todo lo que hagas y digas debe hacerse con amor. ¡Es todo lo que realmente importa!

Preguntas de reflexión:

• ¿Por qué el conocimiento, la generosidad y las otras cosas que el pasaje describe carecen de sentido sin amor? ¿Cómo hace el amor que estas cosas tengan sentido?
• ¿Crees que el mundo describiría a los cristianos como poco amorosos? ¿Cómo podemos ser parte de cambiar esa percepción?
• Piensa en la forma en que interactúas con los demás. ¿Sus acciones serían descritas como amorosas?

Pídele a Dios que te ayude a mostrar amor auténtico a los demás. ¡Esto comienza con creer en el amor incondicional de Dios por ti! Concéntrate en el amor de Dios por ti y pídele que te ayude a reflejar ese amor a los demás.