Más Allá De Las LucesMuestra

La verdadera fiesta

Para ti, ¿qué es lo mejor acerca de la Navidad?

Quizás eres de las personas que creen que no hay nada como juntarse con la familia a comer cosas ricas y tradicionales. Tal vez, estás dentro del grupo que se la pasa esperando que llegue la hora de abrir los regalos. O puede que tu parte favorita sea la preparación previa: La playlist de Mariah Carey sonando en todos lados, las películas temáticas reproduciéndose 24/7 en la televisión y las luces de colores decorando las casas del barrio.

También puede suceder que, por el contrario, por malos recuerdos y experiencias, la Navidad en general no sea una fiesta que disfrutes mucho.

En cualquiera de los casos, ¿qué pasa cuando creemos que el sentido de la Navidad se reduce a una reunión familiar, linda decoración, buena comida y regalos? Si surgen asperezas y la mesa navideña se vuelve una batalla campal, si no tenemos con quién pasarla o perdemos seres queridos, o si la parte que más nos emociona son los regalos y el país está en crisis, es muy probable que “festejar la Navidad” termine convirtiéndose en un sinsentido.

¿Pero realmente eso es todo? ¿Cómo sería una Navidad sin luces, ni regalos, ni una mesa con comida? ¿Tendría sentido festejarla?

Lucas 2 nos cuenta la historia que recordamos en Navidad, el motivo detrás de todo el decorado y la verdadera razón de esta celebración: el nacimiento de Jesús. A causa de este acontecimiento vemos ángeles festejando, pastores dejando su trabajo para ir a conocerlo y reyes viajando desde lejos para llevarle regalos y adorarlo. Evidentemente en ese establo de Belén estaba pasando algo muy importante, sin embargo, para muchos vecinos fue algo que pasó desapercibido.

¿Cuántas veces nos pasa que por enfocarnos en cosas del día a día nos perdemos de lo importante que está sucediendo a nuestro alrededor?

Aquellos que sí se enteraron del nacimiento de Jesús, se alegraron profundamente y celebraron su vida. Y si bien a lo largo de este Plan vamos a reflexionar sobre este Nacimiento, hoy queremos contarte que a través de Jesús, Dios se acercó a nosotros. Por medio de su vida, muerte y resurrección, nos abrió el camino para que pudiéramos conocerlo y disfrutar de una relación cercana con Dios, ¡Como la que uno tiene con un amigo! Este es el verdadero sentido de la Navidad y nada puede opacarlo.

Hoy queremos animarte a que no permitas que las luces de colores te encandilen, que esta Navidad no haya Papá Noel, regalos, comidas o circunstancias que te impidan celebrar el verdadero motivo de la Navidad. Más que tratarse de un evento, recuerdos, tradiciones, e incluso personas, la Navidad es un recordatorio de que Jesús vino a darnos una vida abundante, con libertad y esperanza, y está disponible para nosotros cada día. ¡Esto sí que es motivo de festejo!

DESAFÍO DEL DÍA:

Escribe una o dos ideas prácticas para este año poder celebrar el verdadero sentido de la Navidad sin distraerte con las luces.