De Simpatizantes a DiscípulosMuestra

Primero, es necesario hacer un compromiso con su Palabra.

"Si desean ser verdaderamente mis discípulos deben permanecer en mi palabra".

Los judíos simpatizantes recibieron esta dirección directamente del Señor Jesús, era como si les estuviera entregando la llave para poder accesar a esta dimensión de vida. Si ellos querían llegar a ser verdaderamente sus discípulos debían comprometerse y permanecer en su palabra.

Un discípulo a diferencia de un simpatizante ha decidido tomar la Palabra de Dios en serio. No será más un lector casual, sino que realmente hará un compromiso con las Escrituras. Su deseo es conocer más y más al Señor, anhela conocer su corazón, sus deseos y su voluntad, ha comprendido que es por medio de la Palabra y la ayuda del Espíritu Santo que se puede accesar a un entendimiento mayor del propósito de Dios.

Y es que la Palabra de Dios es más que historia, más que letra. La Palabra de Dios es vida. Es por medio de ella que nuestros espíritus se nutren y se desarrollan. La Palabra ilumina con la verdad nuestro corazón y nos transforma día a día. El engaño y la confusión de nuestra era no encuentran lugar en el corazón que está lleno de la palabra de Dios. Sus promesas nos dotan de fe, nos ayudan a orar con poder y nos fortalecen en medio de toda adversidad.

Por medio de las Escrituras obtenemos conocimiento de Dios y de sus caminos. Llegamos a conocer al Señor Jesucristo y a su salvación. La Palabra renueva nuestra mente y nos dota con los pensamientos de Dios. Con ella derribamos todo engaño y toda mentira de Satanás.

Somos limpiados continuamente y santificados por la Palabra. Recibimos dirección y sabiduría para nuestra vida, consejo para toda situación. Obtenemos aliento, ánimo y esperanza acerca del futuro. En fin, tiempo me faltaría para describir los innumerables beneficios del estudio de las escrituras. El asunto es que, un verdadero discípulo de Jesús debe permanecer en la Palabra de Dios para conocer la verdad y llegar a ser libre en todas las areas de la vida.