Siendo Sherpas de generosidad

Cuando escaladores de todas partes del mundo llegan con la intención de subir las altas montañas del Himalaya [como el monte Everest] necesitan guías o personas que les muestren y les acompañen a lo largo de los retos del camino. Esos guías son los sherpas. Ellos son nativos de la zona, y tienen características genéticas muy peculiares que les permite sobrevivir con más facilidad las alturas.

Los sherpas tienen una fisiología y un metabolismo peculiar, que utiliza el oxígeno de una manera más eficiente que las personas que viven en sitios a nivel del mar. Los sherpas tienen una sangre menos espesa, con menos hemoglobina y una capacidad reducida de retener oxígeno, una característica que tiene la ventaja de hacer que la sangre circule más fácilmente, y esto pone menos presión sobre el corazón. Además, conocen el camino, ya que han ido muchas veces, y han acompañado a muchas personas hasta la cima. Su misión, vocación y alegría es que los escaladores logren el éxito en sus propias jornadas, ellos son facilitadores del ascenso, son apoyadores invaluables. De la misma manera, Dios ha creado a un contingente de personas alrededor del mundo que son nativos de la generosidad, producen y distribuyen recursos como pocos. Dios les ha dado capacidades en esta área. Son personas con un corazón diferente, generoso, y desprendido que les permite sobrevivir en ese ambiente. Además, tienen una determinada disposición para acompañar a otros en su jornada hacia la cima de la generosidad del reino de Dios.

El Apóstol Pablo es un interesante ejemplo de alguien que retó, acompañó y reconoció a otros hacia la generosidad bíblica. De diversas formas retó e inspiró a los Corintios a ser generosos (2 Cor. 8:8-12, 9:10); y en una ocasión les reconoció a los Filipenses por su ejemplar práctica de generosidad al decirles que “…. Ninguna iglesia compartió conmigo en cuestión de dar y recibir, sino solamente ustedes” (ver Filipenses 4:15-17). Estos Sherpas de generosidad no solo son generosos por sí mismos; sino que también su misión, dedicación y satisfacción está en multiplicar el número de escaladores exitosos, es decir, catalizar la generosidad entre otros líderes.

Para reflexionar: ¿Eres nativo de las montañas de la generosidad? ¿Te ha llamado Dios a ser miembro de los Sherpas de generosidad?

Dr. Jesús A. Sampedro.