Encuentros con el Espíritu SantoMuestra

Caminen en el Espíritu

No hay nada mejor que comprender que para los que están en Cristo Jesús, no hay condenación. Esto quiere decir, que ningún pecado que un creyente pueda cometer en el pasado, el presente o el futuro puede contarse en su contra, porque el castigo pleno fue pagado por Cristo. Por eso, es importante entregar por completo nuestra vida a Jesús, confiando plenamente en la seguridad de la salvación eterna que Él nos ofrece.

Cuando andamos conforme a la carne, hay debilidad y esto nos implica acercarnos a Jesús, ya que la mayoría de las veces el enemigo nos avergüenza, trayendo culpabilidad y alejándonos cada vez más al propósito de Dios para nuestras vidas. Mientras que, cuando caminamos en el Espíritu, tenemos la convicción de que estamos en Jesús y por ello nuestra vida no vuelve a ser la misma cuando tenemos un encuentro genuino con Él.

Cada vez que intentemos caer, recordemos de dónde Dios nos rescató: Nos sacó de la esclavitud, del temor, de la depresión y de la enfermedad. Por eso, aunque el camino pueda parecer difícil, sigamos caminando en el Espíritu, anhelando su llenura cada día.

Es importante reconocer que donde está el Espíritu de Dios, hay libertad (2 Corintios 3:17). Nunca dudes de que Él nos ha liberado.

Oración:

Jesús, gracias porque sé que no hay condenación si estoy en ti. Confío en tus promesas y decido caminar en el Espíritu. ¡Amén!