Encuentros con el Espíritu SantoMuestra

¿Conocer o conocer sobre?

En la religión, más que en cualquier otro campo de la experiencia humana, siempre debe hacerse una clara distinción entre conocer sobre y conocer. La distinción es la misma que existe entre conocer la comida y comerla en realidad. Un hombre puede permanecer espiritualmente muerto mientras conoce todos los hechos históricos del cristianismo.

Por eso, en Juan 17:3 está escrito: «Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado». Solo tenemos que introducir una palabra para entender la gran diferencia entre conocer sobre y conocer. «Esta es la vida eterna: que conozcan sobre ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado».

Esta palabra marca la diferencia, incluso entre la vida y la muerte.

No concluimos que, porque aprendemos sobre el Espíritu, significa que realmente lo conocemos. Conocerlo solo se logra verdaderamente cuando tenemos un encuentro personal con el Espíritu Santo mismo.

A pesar de que pasemos por tiempos difíciles, es importante mantener nuestra confianza y fe, siguiendo el ejemplo de Pablo como se expresa en 2 Timoteo 1:12. Debemos afirmar en quién depositamos nuestra confianza, pues si confiamos en Dios, ¿qué motivo tenemos para temer?

Es importante que conozcas íntimamente al Espíritu Santo, pues experimentarás algo que no se puede describir. Es el tiempo de entregarle tu vida por completo a Dios.

Oración:

Señor, te pido que pueda tener un encuentro genuino contigo para conocerte íntimamente y confiar en que tú tienes todo bajo control. ¡Amén!