Una Perspectiva Bíblica De La Vida Y La MuerteMuestra
La muerte no es el fin.
"Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos" (2 Corintios 5:1, NBLA).
Cuando alguien muere, es evidente en su cuerpo. El corazón deja de latir y, debido a que la sangre ya no fluye, el cuerpo se vuelve frío y rígido. La vida se ha ido y nunca volverá. La muerte es final e irreversible.
Pero la muerte física no es el final. Esto queda claro en el versículo que leímos hoy. Un ser humano es mucho más que su cuerpo físico. De hecho, la Biblia compara nuestro cuerpo con una tienda en la que vivimos temporalmente. Después de morir, intercambiamos esa tienda por un hogar permanente. Y el juicio de Dios determina dónde estará esa morada: con Él en el cielo o fuera de Su presencia en el infierno.
Es importante entender que este juicio de Dios sobre tu destino eterno no es arbitrario. La Biblia es muy clara al respecto. En realidad, nadie merece pasar la eternidad con Dios porque lo hemos ignorado y lastimado profundamente con nuestros pecados. Pero todos los que aceptan Su oferta de perdón y reconciliación son bienvenidos. Debes tomar esa decisión en esta vida. No tendrás una segunda oportunidad después de la muerte.
¿Vives con la conciencia de que hay más que solo esta vida terrenal?
Escrituras
Acerca de este Plan
La muerte es parte de la vida, o al menos eso es lo que tendemos a pensar. Pero el Señor ha conquistado la muerte; Él nos ofrece la vida eterna. Conectados a Él, experimentamos la plenitud de la vida en cuerpo y alma.
More
Nos gustaría agradecer a GlobalRize por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://globalrize.orghttps://globalrize.org