Maternidad Llena De GraciaMuestra

Vivir con Fortaleza

Leer: 2 Pedro 1:3-11

EOAO: 2 Pedro 1:3

Dios, por su poder, nos ha dado todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia.

En el Texto

Amada hermana, vivir una vida de fortaleza no se trata de destreza física o de la capacidad de manejar todo tú sola. Se trata de perseverar, de mantenerse constante en el camino, arraigada en una fe firme.

En nuestros roles como mamás, hermanas y amigas, está incluido el llamado a ser guerreras espirituales. No es sólo proteger y criar a nuestra familias en lo material, sino también en lo espiritual. Hallamos nuestra verdadera fuerza en Dios. En Él, hallamos la fuerza para vivir una vida que le glorifique.

Exhibimos mayormente esta fuerza al primeramente cultivar nuestra relación personal con Jesús. No podemos derramar las verdades y el amor de Cristo si primero no permitimos que nos llene. También mostramos esta fuerza al orar por nuestros hijos, animándolos con la Palabra de Dios, y amándolos a través de sus triunfos y fracasos. Es en estos actos de fidelidad que le mostramos a nuestros hijos lo que significa confiar en Dios, fortalecernos en Él y confiar en Su plan, aún en medio de las tormentas de la vida.

Nunca olvidemos que la fuerza que necesitamos para cada día viene de nuestro Padre Celestial. Es su fuerza la que nos permite perseverar, estar firmes en la fe, y compartir Su amor y gracia en nuestras casas y comunidades.

Oración

Amado Jesús, gracias por la fuerza que me provees en cada aspecto de mi vida. Ayúdame a vivir una vida perseverante, sembrada en Tu poder. Que mis acciones y palabras sean testimonio de Tu fuerza, a medida que apoyo a aquellos que has colocado en mi vida. Amén.

Pregunta

¿Cómo puedes demostrar la fuerza de Dios en tu vida hoy, especialmente en esos momentos que requieren de perseverancia y fe?