Viviendo Fielmente en Una Tierra Sin FeMuestra

Eres de gran valor

Leer: Daniel 10:1; Daniel 10:5-19; Salmo 116:12-15

EOAO: Daniel 10:11-12

“Me dijo: —Daniel, tú que eres muy amado, está atento a las palabras que he de decirte y ponte en pie, porque he sido enviado a ti ahora. Mientras hablaba esto conmigo, me puse en pie temblando. Entonces me dijo: —Daniel, no temas, porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de ellas yo he venido”.

En el texto

Daniel tuvo otra visión. Le aterrorizó tanto que cayó de bruces, incapaz de moverse. Los que estaban con Daniel estaban tan aterrorizados que huyeron, ¡aunque ni siquiera vieron la visión!

Sin embargo, la visión también le dio a Daniel una gran comprensión acerca de los últimos días. Pudo ver que no estaba fuera de control. Dios tenía un plan y estaba totalmente a cargo de todos los días del tiempo, incluso cuando las cosas no iban como a Daniel le gustaría.

Dios habló palabras de amor y consuelo a Daniel. A lo largo de su vida, Daniel había mostrado una actitud de humildad. ¿Por qué? Daniel permaneció enfocado en Dios. Confió en Dios muchas veces, durante pruebas más pequeñas y más grandes. Había conocido la bondad del Señor. Daniel procuró pagar la bondad del Señor viviendo fielmente. Daniel tomó decisiones sabias al dedicar tiempo regularmente a hablar con Dios en oración y leer Su Palabra. Ahora Dios estaba respondiendo sus oraciones de maneras que Daniel no podría haber previsto.

¿Alguna vez has considerado la verdad de que el Señor te valora? Él conoce tus pruebas y ve tu fidelidad. Él te valora y te ama porque eres Su preciosa hija, comprada por Él a un precio muy alto.

El Señor escucha vuestras oraciones. Su oído está atento a ti. Durante la próxima semana, dedica algún tiempo a hablar con Dios. Presenta humildemente toda tu vida ante Él, así como la de aquellos que habitualmente están en ella. Pide que se haga su voluntad en tu vida. Recuerde que Dios a menudo responde nuestras oraciones de maneras que no podemos imaginar.

Oración

Padre Celestial, ayúdame a ser fiel. No sólo ves mis acciones sino las actitudes de mi corazón. Estoy asombrado y verdaderamente humillado de que el Dios que creó y sostiene el universo y todo lo que hay en él, ame, valore y escuche mis oraciones. Gracias Señor. Amén.