La voluntad de Dios está por encimaMuestra

LA ADORACIÓN ESTÁ POR ENCIMA

IDEAS BÁSICAS

• La entrada de Jesús en Jerusalén se asocia a un ambiente de alabanza y adoración por parte de la multitud de discípulos.

• No todos adoraban; la incredulidad, la envidia y la hipocresía generan odio, no adoración.

• Jesús restaura el culto en el templo, que se había convertido en un lugar de negocios mundanos y arreglos religiosos. Los enfermos son curados.

Cualquier relación correcta de la gente con Dios es a través de la adoración. La adoración está por encima de cualquier otra cosa que se pueda llevar a Dios. Uno de los episodios de los evangelios que contiene referencias a la adoración es con ocasión de la entrada de Jesús en Jerusalén. Una atmósfera de alabanza invadió a la multitud de discípulos. Incluso los niños gritaban alabanzas al Señor. Por supuesto, no todos adoraban. Los líderes religiosos con corazones infieles y perversos no podían adorar. Otro lugar donde se abandonaba el culto era el propio templo de Dios. Aquí se daba prioridad a las ofrendas que, por supuesto, debían hacerse a tiempo, según las normas y en beneficio del templo, que necesitaba financiación. Así, aquí se organizaba un verdadero negocio que favorecía y apoyaba el trabajo en el templo. En cuanto al culto, Jesús tomó inmediatamente las medidas necesarias y expulsó a todos los que hacían negocios allí, restableciendo el culto en la Casa de Dios. ¡Qué triste es ver que precisamente en la Casa de Dios, aunque haya ofrendas, falta el culto! Si nos fijamos en algunas de las iglesias de nuestro tiempo, podemos ver una similitud con la atmósfera del templo en ese momento. Para muchos, la prioridad ya no es la adoración y la santificación, sino todo tipo de negocios y eventos que traigan la mayor ganancia posible y sostengan financieramente al ministerio. La prosperidad financiera se llama bendición, mientras que la verdadera adoración en espíritu y verdad parece ser un deseo inalcanzable. El hecho de que la salvación es personal y cada uno puede resolver su problema espiritual leyendo la Palabra diariamente y aplicándola a su vida, sin dejarse influenciar por una religión u otra, es algo refrescante.