Conspiraciones InternasMuestra

Nos gustan las películas en las que protagonizan los héroes y, de cierta manera, también los villanos. Es particularmente atractivo porque nos muestran una perspectiva de aquello a lo que aspiramos y, de alguna manera, también de aquello que tratamos de evitar seguir cuando se trata de maldad.

Las conspiraciones son un tema que inspira la gran mayoría de películas, documentales o reels, donde la intriga y el complot son los principales componentes de atracción. La gran pregunta es: ¿Por qué nos llaman la atención esos detalles ocultos? ¿Será que esto se debe a los secretos más guardados dentro de nosotros?

La realidad es que, en medio de un mundo donde la maldad es parte de la vida, nosotros batallamos en nuestro corazón por vivir de manera diferente. Jesús vino a mostrarnos la forma de enfrentar al villano que todos tenemos dentro.

Nuestro mayor reto está en descubrir aquellas cosas que maquinan en nuestra naturaleza caída y viciada por el pecado. Es importante comprender que podemos ser propensos a permitir que la tentación o el pecado toquen a la puerta, y es ahí donde nuestra dependencia de Dios debe ser más fuerte.

Me asombran las sinceras palabras de David cuando elevó esta oración a Dios:

Protégeme, Señor, de los planes secretos de los malvados,
que con sus palabras afiladas
atacan a los inocentes.
Conspiran en la oscuridad,
creyendo que nadie verá lo que hacen (Salmo 64:2-6).[Parafraseado]

Cuando somos sinceros, tal como lo fue David, nuestro corazón se abre a una devoción por Dios llena de posibilidades. No podemos creer la idea de que nuestras acciones le son desconocidas a Dios.
Él lo sabe todo de nosotros y desea que vivamos una vida sin mentiras.

Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo;
en lo secreto me has enseñado sabiduría (Salmo 51:6).

Es un buen momento para que hagamos una pausa y meditemos en la vida que estamos llevando delante de Dios. Toma un espacio en tu día y habla con el Espíritu Santo para permitir que te lleve a Jesús y su luz admirable.