Navidad: El Nacimiento Que Cambió El MundoMuestra

Jesús nació y con Él la esperanza, sólo tenemos que creer

Es entendible que todo lo descrito hasta este punto pueda parecerles a muchos solamente un fantástico relato y negarse a aceptarlo como verdad. Lo cierto es que no hay más que examinar con detenimiento a nuestro alrededor para ver la obra de un ser Todopoderoso, completamente superior a nosotros, que todo lo puede. Más aún, cuando auto examinamos nuestro ser interior, nuestros corazones, el vacío que muchos habíamos cargado, tratando de llenarlo con infinidad de alternativas que el mundo nos ofrece, sin éxito alguno por cierto, y sencillamente es porque ese vacío tiene la forma de Dios: será hasta que le demos cabida a Él con fe y humildad, entregándole incluso nuestras dudas e interrogantes, en ese mismo momento el Señor nos dará de beber de su agua viva para no tener sed nunca más (Juan 4: 7-14). Cuando llenemos nuestras mentes de la indiscutible verdad de que el apóstol Pedro supo cuando reconoció a Jesús como el Cristo enviado por Dios (Mateo 16: 13-17) y como Pedro, aceptemos que sólo Jesucristo tiene palabras de vida eterna que reconfortan nuestro ser (Juan 6: 67-69), ahí seremos transformados y habremos encontrado lo que algunos habíamos buscado incansablemente, mientras que otros se habían dado por vencidos.

Es preciso recordar que en la vida cristiana “andamos por fe y no por vista” (I Corintios 5: 7). En ese momento, cuando aceptamos a Cristo como Rey único y le pedimos que sea el Señor de nuestras vidas, es cuando inicia el maravilloso y milagroso camino de la redención (Hebreos 11: 6), cuando empezamos a experimentar milagros inexplicables, como tener paz en medio de las tormentas (Filipenses 4: 7). ¡Sólo créelo!

Jesús es el propósito y origen de la Navidad, no son los regalos, las luces y hermosas decoraciones, no es Papá Noel ni las cenas con familiares y amigos. Cristo se hizo hombre para rescatarnos, pues sin Él estamos perdidos, extraviados, sin rumbo y sin esperanza, pero ahora sabemos que es Jesús el inicio y el fin de todo, Él lo mejora todo, lo transforma todo. Como lo explicó el Pastor Rick Warren en un Devocional sobre la Navidad: “Simplemente, Jesús vino porque la gente se pierde sin Dios. Estar perdido espiritualmente significa estar separado de Dios, desconectado y desorientado. Sin Jesús, todos en el mundo están perdidos, sin importar cuánto poder, riqueza o fama tengan". Añade el Pastor Warren: “La Buena Nueva es que Dios nos amó tanto que envió a su Hijo a la Tierra en la primera Navidad para buscarnos y salvarnos. ¡Esa es la razón para celebrar!”.

ORACIÓN

Mi amado Pastor, te pido que hagas de mí tu oveja rescatada, aquella que se perdió, pero que se sabe amada por aquel que dejó el resto del rebaño para venir a salvarme y redimirme. Que con mi vida, mi testimonio, mi transformación, lleve convencimiento a los que te conocen y sepan que algo nuevo y mejor es posible cuando aceptamos la sorprendente obra de amor del Señor Jesús, cuando nos atrevemos a simplemente experimentar la “sobrenatural esperanza de Dios”. Jesús, cúbrenos con fe en tu amor, en tu nombre, amén.