«La Elección Para Toda La Vida»Ejemplo

     «Una elección»
 

    Las elecciones políticas tan frecuentes, nos tienen acostumbrados a elegir. La elección correcta de un hombre es importante a nivel personal y también como nación, porque tenemos que vivir con lo que hemos elegido. Convivimos con algunas elecciones cada cuatro años o cada seis, pero a veces, cuando tan sólo han pasado unas pocas semanas o meses, nos lamentamos por la elección realizada, pero tenemos que habituarnos al mandatario elegido.
 

    La elección más importante que una persona tiene que hacer, aparte de confiar en Cristo, es la elección de su pareja para toda la vida. Esta elección no es para cuatro o seis años sino, una que afectará toda la vida. La primera pregunta que debemos hacernos al enfrentarnos con una decisión tan importante es, ¿qué dice la Biblia?
 
 

    Consideremos Proverbios 18:22, en la versión en inglés dice: «El que encuentra esposa halla una cosa buena…». Hace muchos años hablé sobre este versículo ante un grupo de varios cientos de jóvenes. Después de la reunión escuché a un par de   muchachos que hablaban y uno le preguntaba al otro: «¿Ya conseguiste alguna   cosa buena?». Una chica que pasaba los escuchó, y dijo molesta: «¡Escucha, quiero decirte que yo soy más que una cosa!». Ante lo cual el muchacho respondió: «¡Espero que lo demuestres!».   Dios habla en este versículo a través del hombre sabio, hace referencia a una elección esencial de la vida, la elección de una esposa.
 

    Al considerar las palabras de este pasaje observa también algunas expresiones del gran expositor, Martin Lloyd Jones. Se refirió sobre la   elección de una esposa: «Asegúrate de tener una visión cristiana del matrimonio porque no existe otra cosa igual. Es una visión totalmente   diferente a cualquier otra porque se la encuentra solamente en la Biblia». Continúa diciendo: «Aunque parezca una idea desagradable, debo decir que la   visión común que se tiene acerca del matrimonio es puramente física. Es algo que está basado casi exclusivamente en la atracción física y el deseo de   gratificación en esta área. Es una legalización de la atracción y gratificación físicas».
 

    A la sagrada unión en matrimonio se la considera, demasiado a menudo, como   nada más que eso, una consumación física de un atractivo físico, esto trae como consecuencia el escándalo que se desencadena por la cantidad de divorcios, que cada vez se incrementa.