Levantando Los Brazos Del PastorMuestra
Bendice A Tu Pastor
Bendigo a mi pastor, a Gabriel Bustamante; aquel hombre a quien Dios ha delegado para enseñarme e instruirme en santidad, justicia y verdad acorde a la imagen y al carácter de Jesucristo mi Señor y mi Salvador; bendigo su vida y la vida de su amada familia porque son instrumentos de bendición en las manos de Dios para mi vida y para mi hogar. Padre, guarda su corazón y sus pensamientos en Cristo Jesús; guárdalo Señor de desviarse y sigue fortaleciéndolo en tu sabiduría y poder, para que cada vez que lo uses, la impartición de tu Espíritu pueda también fluir en nosotros a través de la Palabra reveladora que siempre nos entregas a través de las enseñanzas que pones en su corazón.
Padre, bendice y cuida de todos los pastores que acorde a tu voluntad están apacentando a tu rebaño; dales fuerzas Señor y no permitas que desfallezcan en medio de las pruebas, los ataques o las aflicciones que tienen que enfrentar. Si notas que alguno de ellos está haciendo algo que no está acorde a tu voluntad, revélalo Señor ante sus ojos y dales la gracia para alinearse a tus propósitos. Ellos siguen siendo seres humanos, llenos de imperfección; ellos al igual que todos nosotros estamos en proceso de perfeccionamiento, no permitas que lo olvidemos.
Ayúdanos Señor, danos el discernimiento y la sabiduría que necesitamos para ponerla por obra en la unidad a la que nos has llamado como hermanos, para que juntos como un ejército valiente podamos ir al frente de tu liderazgo y del poder de tu Espíritu en cada batalla que enfrentamos como vencedores en Cristo Jesús.
Ten piedad de tu pueblo, ten piedad de la iglesia que edificas en Cristo Jesús; no permitas que nos rindamos, no nos dejes volver atrás. Muéstranos qué ídolos debemos derribar para que entre todos, los derribemos por amor y para gloria de tu Nombre en Cristo Jesús. Amén.
Escrituras
Acerca de este Plan
En ocasiones olvidamos que aunque somos hijos de Dios, vamos a enfrentar pruebas, ataques y aflicciones que fácilmente nos pueden debilitar, y los pastores o líderes ministeriales no están exentos de esto. Es cuando en unanimidad debemos testificar del amor y la bondad que hemos recibido de Jesucristo, levantando los brazos de aquellos que en momentos difíciles necesitan nuestro apoyo para que juntos podamos alcanzar la victoria en Cristo Jesús.
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Nos gustaría agradecer a Marysela Ocampo O. por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.facebook.com/confiadosenJesucristo/