Florece Donde Has Sido PlantadaMuestra

Las circunstancias que nos rodean como el abandono de nuestros padres, el rechazo, la infidelidad, la baja autoestima o cualquier momento que estemos pasando, muchas veces nos hace olvidar Sus promesas y de Su fiel amor.

Los discípulos también lo experimentaron y podemos ver en Hechos 1:3-4 cómo Jesús estuvo con ellos, consolándolos porque sabía que ellos estaban tristes y les hablaba del reino de Sus promesas. Les recordó, incluso, en el versículo 4 que no se movieran de Jerusalén hasta que recibieran la promesa del Padre.

José experimentó la traición de sus hermanos, lo vendieron, lo acusaron falsamente y tuvo que pagar un delito que no cometió. Pero, él seguía creyendo lo que Dios un día le mostró a pesar de las circunstancias que estaba atravesando.

Florecer donde hemos sido plantadas no será fácil pero ten la seguridad que Sus promesas siempre se mantendrán firme.