Al Cuidado De DiosMuestra

Mi Pastor

El Señor es mi pastor; tengo todo lo que necesito (Salmos 23:1 NTV).

La figura del pastor era muy importante para David pues él era un pastor de ovejas en la casa de su padre. Él sabía muy bien lo que debía hacer un pastor. El pastor cuidaba, protegía, guiaba, proveía y corregía al rebaño. Si en aquel tiempo había un trabajo que se dedique al cuidado, ese era el trabajo de pastor.

Cuando David dice: "El Señor es mi pastor", lo que estaba diciendo es: El Señor me cuida, me protege, me guía, me provee, me corrige. Y al mismo tiempo reconoce que hay una relación personal entre él y su Pastor. Lo sabemos porque dice "mi pastor".

David se tomó fuertemente de Dios y lo hizo su Pastor. Esta declaración nos lleva a meditar si realmente nos hemos abandonado en las manos de Dios para que sea Él quien nos cuide de todo peligro; para que sea Él quien nos guíe por el camino correcto; para que sea Él nuestro todo. Para que Él sea nuestro Pastor.

Debemos hacer nuestro a Dios, y así como David decía, nosotros también podemos decirlo ahora, Dios es mío, es mi Pastor.

De ahí la última declaración de David: "Tengo todo lo que necesito". Si realmente hemos hecho de Dios nuestro Pastor, podemos decir confiadamente que tenemos todo lo que podríamos llegar a necesitar. Si dejamos que Dios tome el primer lugar en nuestro corazón no hará falta nada, pues Su eterno amor nos suplirá, nos cuidará, nos sostendrá y nos dará esa satisfacción completa.

Si el Señor es tu Pastor entonces no te preocupes. La preocupación no te llevará a ningún lugar bueno, todo lo contrario, te enfermará, te hará mucho daño. La preocupación viene cuando piensas en todo aquello que sale de tus manos. Solamente cree que Dios cuida de ti. Te tengo una buena noticia, si el Señor es tu Pastor estarás seguro, nada puede escapar de Sus manos.