Soltando el pasadoMuestra
QUEMANDO LOS BARCOS
Abriré mi corazón y te contaré un poco sobre la lucha que enfrentaba… hubo una temporada en la que cada día esperaba que el reloj marcara las 12:00 am para ir a mi baúl de recuerdos de hace años y mirar todos los recuerdos, a veces me encontraba mirando fotografías, recordando viejas amistades, momentos felices o momentos tristes hasta que Dios hizo que me diera cuenta de que no solo estaba viviendo en mi pasado sino también en el pasado de las personas con las que me relacionaba, créeme que me parecía imposible salir de eso, parecía que me había vuelto adicta al pasado y a la melancolía,me parecia dificil olvidar y soltar, sin embargo desde mi presente te digo que ¡es posible!
Una de mis oraciones constantes a Dios en ese tiempo fue:
“Dios ayúdame a recordar lo que tengo que recordar y ayúdame a olvidar lo que tengo que olvidar”
Pasado un tiempo Dios me enseñaba que cada día a las 12:00 am subía a “mis barcos” en los que emprendía un “viaje hacia mi pasado y el pasado de los demás”
Quizá estás pensando “¿a qué te refieres con los barcos? sin embargo me gustaría que comenzaras a reflexionar sobre ¿cuáles son tus barcos? es decir, ¿Qué es aquello que te ata al pasado?¿Cuál es el barco al que te subes para regresar al pasado? En mi caso yo diariamente me subía a ese barco mirando las viejas fotografías, yendo a mi baúl de recuerdos, visitando perfiles.
Una vez que hayas detectado tus barcos, el siguiente paso es tomar la decisión, toma la decisión de quemar esos barcos que has utilizado para volver. ¡Hoy es el momento de encender fuego!
Quemar los barcos era una frase conocida por navegantes, se dice que Hernán Cortes dió esta instrucción al llegar a tierra. Luego de haber notado que estaban demasiados temerosos para explorar el nuevo territorio, llamó a sus hombres a la orilla del mar y les ordenó quemar los barcos para que solo pudieran caminar hacia adelante sin retroceder.
Muchas personas se encuentran atadas al pasado por la vergüenza, el dolor, la culpa, el rencor, la frustración, etc pero Dios nos invita a caminar hacia un nuevo día, hacia lo nuevo que tiene para nosotros, a ser libres verdaderamente a través de Su verdad, nos invita a quemar los barcos. Desconozco cuáles barcos has estado utilizando, tal vez tienes que dejar de ver o de meterte a perfiles de personas, tal vez es dejar de ver fotografías o de leer mensajes, tal vez es deshacerte de los recuerdos que has guardado, tal vez es dejar esos pensamientos de culpa o de condenación y reemplazarlos con la verdad.
Analiza que barcos debes quemar, se transparente contigo misma/o, ¿qué lazos debes cortar? Pídele ayuda a Dios, estoy segura de que el Espíritu Santo te lo revelará y te mostrará qué es lo que debes hacer.
Y es que cuando Dios te saca de algún lugar puede haber un momento en el que desees volver atrás y será fácil regresar a él si tienes tu barco listo para zarpar. Por eso ¡quema los barcos! ¡corta lazos!
Comienza a vivir en el presente que es donde corresponde. El deseo de Dios nunca será que vuelvas a tu pasado ni al lugar de donde Él te sacó,ni a las personas o relaciones de las cuales Él te libró y su deseo es tan grande que Él no quiere que viajes a tu pasado a través de tus pensamientos.
Ejemplo de este deseo lo encontramos en el libro de Éxodo. Cuando Dios liberó de la esclavitud al pueblo de Israel y los sacó de Egipto lo condujo por el desierto rumbo a la tierra prometida, ¿sabías que Dios los llevó por el camino largo y no por el camino más corto?Esto lo hizo porque conocía el corazón de Su pueblo.Y es sorprendente si tan solo miramos al pueblo de Israel ¿Puedes creer que el pueblo desearía volver al lugar en donde habían sido esclavos? ¡ahora eran libres! pero durante su viaje, comenzaron a desear regresar a Egipto, a su antigua vida, se habían acostumbrado a vivir de esa forma que eso les parecía la mejor opción que incluso la esclavitud les parecía comoda.
Dios los había sacado de Egipto y ahora los estaba dirigiendo hacia la tierra prometida, tenían todo lo que necesitaban, Dios estaba abriendoles un nuevo camino por el desierto y hacía brotar agua en tierra desoladas, ¡pero no se daban cuenta!
Dios se aseguró de que su pueblo no volviera atrás y creo que de alguna forma esta historia tiene un poco de similitud con quemar los barcos.
La quema de barcos representaba seguir adelante, no cambiar de parecer, no regresar, no volver atrás y Dios al llevarlos por un camino más largo estaba asegurando de que no se volvieran atrás.
Tal vez puede parecerte difícil quemar tus barcos por el temor al futuro pero una vez más recuerda que Dios tiene planes de bien para tu vida, que Dios siempre te dará lo mejor y que con Él a tu lado irás como la luz de la aurora, que va aumentando en resplandor.
¡Confía en Dios! Si Él te pide que lo hagas hazlo, no tengas miedo y confía en Él.
ORACIÓN: Por favor Dios, manda tu fuego que consuma todo, consume esos barcos a los que me he subido para recordar el pasado, dame la valentía para tomar la decisión, no permitas que navegue nuevamente hacia el pasado,no quiero hacer nunca más uso de los barcos de pensamientos de culpa, esos barcos de sentimientos de verguenza, de rencor, de frustración, de curiosidad o de resentimiento, ayudame a tomar esa libertad y valentía en el Nombre de Jesús. Amén.
Acerca de este Plan
A diario enfrentamos una lucha en nuestra mente con pensamientos que en su mayoria están relacionados con el pasado. Lo cual suele influir en nuestras emociones, en nuestra manera de vivir y en nuestras relaciones con los demás. Dios quiere traer libertad y sanidad a tu vida. ¿Estás listo? ¡Soltemos lo que ya no es!
More
Nos gustaría agradecer a Fátima Meza por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://linktr.ee/soyfatimaa