Salvos por GraciaMuestra

Día 2

¿Qué es la gracia?

La palabra “gracia” se define como:

“Don o una concesión (otorgar) que se concreta sin ningún merecimiento en particular”.

Para poder hablar sobre la gracia, primero debemos comprender su significado; con la definición anterior podemos ver que la gracia es algo que se otorga sin ningún merecimiento. Aunque suene raro e incluso ilógico; si analizamos esto, para que alguien tenga gracia, debe tener amor. Es decir; si nos ponemos a pensar, ¿Por qué le damos un regalo a alguien? Tiene que haber un motivo, una razón, una intención, algo que nos impulse a darlo.

Ahora te pregunto; ¿Le darías un regalo a alguien que ha hecho algo mal? O para ponerlo más difícil; ¿Le darías un obsequio a alguien que te lastimó? Creo que rotundamente me dirías que no, cualquier persona diría que no. Sin embargo, hay una excepción, una persona que dio un regalo no porque fuéramos buenos, sino que nos lo dio simplemente por amor; esa persona es Jesús. Míralo de esta forma, si para dar algo, tiene que haber algo que nos impulse a hacerlo, para Jesús, la razón por la cual lo hizo, lo que lo impulsó a darnos ese regalo llamado “Gracia”, fue el amor.

Si volvemos al inicio de la creación, podemos ver que Dios hablaba con Adán prácticamente cara a cara, es decir, Adán tenía un acceso libre para poder hablar y estar con Dios, sin embargo, el pecado se volvió una barrera entre Dios y la humanidad. Tú y yo, estábamos destinados a no poder estar en la presencia de Dios, estábamos muertos en pecado. Este punto, lo profundizaremos mañana, pero lo que quiero que analicemos con esto, es que, Jesús se convirtió en ese puente para que tú y yo tuviéramos acceso nuevamente a la presencia de Dios. Imagínate, Jesús pago un precio que nosotros debíamos pagar, pero Él tomó nuestro lugar, sufrió por nosotros, y todo eso lo hizo por amor. Me pongo a pensar, si en algún momento el corazón de Dios se entristeció debido a nuestro pecado, a nuestra maldad, el corazón del padre apartado del corazón de los hijos, pero el amor fue tan grande para que Jesús volviera a unirnos con Dios, con nuestro Padre, aun cuando tú y yo estábamos en pecado. ¿No crees que esto es hermoso? Eso querido amigo y amiga; eso es GRACIA.