Antiguo Pacto vs NuevoMuestra

Real Sacerdocio

Adán y Eva fueron puestos en el Edén, un jardín especial, diferente a todos en la tierra, era literalmente el cielo en la tierra, un templo que Dios creó, donde les dio acceso al árbol de la vida, ellos tenían la orden de labrar y guardar en la presencia de Dios. Este término ‘’labrar", en las traducciones se transformó en ‘’ministrar’’ o ''servir'' pero la raíz es la misma. Los sacerdotes y levitas también tenían la orden de labrar o ministrar y guardar el templo en su presencia, esto nos demuestra que Adán y Eva fueron puestos como sacerdotes en la tierra, para gobernar a la imagen y semejanza de Dios, pero por confiar en su propia opinión sobre lo que es el bien y el mal y desobedecer fueron destituidos.

Si repasamos las órdenes de Dios respecto a la distribución de las 12 tribus en el campamento, podemos recordar que la casa de Dios estaba en medio de ellos y que a todas las tribus se les asignó un territorio en la tierra prometida, excepto por la tribu de Leví. La instrucción a esta fue: “Y Jehová dijo a Aarón: De la tierra de ellos no tendrás heredad, ni entre ellos tendrás parte. Yo soy tu parte y tu heredad en medio de los hijos de Israel". Todos los hombres de la tribu de Leví eran los encargados de servir a Dios personalmente, de esta tribu descendían todos los sacerdotes, se encargaban de todas las tareas dentro del tabernáculo, de los sacrificios rituales, de la adoración y el servicio a la comunidad, como enseñar los mandamientos de Dios y en el cuidado de los enfermos, entre otras.

La primera familia que oficialmente perteneció a esta tribu sirviendo en el tabernáculo, es la de Amram y Jocabed, especialmente sus tres hijos, ellos fueron esclavos en Egipto y presenciaron todo el proceso de liberación del pueblo. Myriam se hizo conocida por alegrar al pueblo con sus alabanzas a Dios, era música y tal vez compositora, Aarón fue llamado a ser el sumo sacerdote del pueblo y su descendencia. Moisés también fue sacerdote, aunque su rol fue más el de un profeta.

Creo que esta tribu identifica a los verdaderos hijos de Dios, el que no hayan tenido su propia tierra y que para ellos Dios sea su parte, me hace pensar que les recordaba que su verdadera ciudadanía no era terrenal, sino celestial, solo ellos podían portar el arca del pacto, es decir, la presencia de Dios. Al igual que hoy, en el nuevo pacto, Jesús nos hizo sacerdotes suyos, porque nos limpió, nos enseñó el camino para vivir apartados del pecado del mundo, nos permitió acercarnos a su presencia, nos convirtió en su templo, en sus ministros que aman y sirven, qué ministran su palabra proclamando el evangelio y levantan adoración e intercesión, que viven y representan su Justicia y santidad, esto solo los sacerdotes de Dios pueden hacerlo.

¿Has pensado si tu vida es una vida de sacerdocio? ¿Cómo podrías aplicarlo? Vive una vida de sacerdocio viviendo por su Espíritu, orando en todo tiempo, viviendo en amor y servicio, que de tu corazón siempre fluya adoración e intercesión, que sea en tu forma de pensar y de actuar, en tus hábitos y decisiones diarias, que Jesús sea tu objetivo en la vida y que su reino crezca a través de tu vida también.

Oración: Amado Dios, es hermosa la obra que hiciste en nuestra vida, gracias por regalarnos el privilegio y el honor de servirte, gracias por enseñarnos a amar, a vivir una vida de adoración y justicia. Amo Tu presencia y aprender más de quién eres y así entender quién soy en ti. En el nombre de Jesús, amén.