Permaneciendo en Jesús - Llevando Fruto DuraderoMuestra

Meditando en los preceptos de Dios

Lectura: Salmo 119:15-16

EOAO: Salmo 119:15-16

"En tus mandamientos meditaré; consideraré tus caminos. Me regocijaré en tus estatutos; no me olvidaré de tus palabras" (RV2020).

En el texto

Cuando era más joven, me estresaba si no pasaba tiempo con Dios en Su Palabra cada mañana antes de la escuela. En esa etapa de mi vida, pasar tiempo con Dios era más una tarea que una alegría. Lo veía como algo que necesitaba marcar como hecho en lugar de alguien con quien esperaba pasar tiempo.

Así como leer un libro sobre alguien no es lo mismo que conocerlo personalmente, de igual manera sucede con la Palabra de Dios. Nuestro objetivo no es solo aprender sobre Él, sino conocerlo personal e íntimamente.

Estoy agradecida de que a través de los años, he crecido en el "deleite" en la Palabra de Dios. Reservar este tiempo con Él diariamente es muy importante. Es la forma en que Él nos habla, corrigiendo, consolando y alimentando nuestras almas hambrientas. Pero aquí está la belleza de permanecer. No se detiene cuando cerramos nuestra Biblia o decimos "Amén". Permanecer significa caminar con Él durante todo el día, no solo en nuestras mañanas.

Meditar en los preceptos de Dios es dejar que Su Palabra habite profundamente dentro de nosotros. Es más que simplemente Lectura; es darle vueltas a Sus palabras en nuestros corazones, saborearlas y dejar que nos moldeen. Mientras pasas tiempo en Su Palabra, pídele a Dios que hable a tu corazón. Luego, a medida que transcurre tu día, el Espíritu Santo traerá esas verdades a tu mente, guiándote, consolándote o dándote sabiduría. Eso es permanecer. No es solo un "tiempo de silencio". Es una conversación continua.

Oración

Querido Jesús, que mi tiempo contigo sea más que un momento, sino una conexión continua que moldee mi vida. Quiero conocerte más profundamente, no solo saber de ti. Amén.