Como nunca antesMuestra

Una vida gloriosa  

Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti.

2 Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria.

Isaías 60: 1-2

Si hay un sentimiento común en los de seres humanos es el deseo del bienestar propio. Todos deseamos las mejores cosas en la vida, un buen trabajo, una linda casa, un buen auto, una vida de la cual podamos sentirnos satisfechos, y es en función de eso que el ser humano se esfuerza trabajando y planificando. Quizá planificamos cosas que no las llegamos a concretar, sueños que quedaron en el camino. Lamentablemente por el hecho de vivir en un mundo golpeado por el pecado nos ocurren estas cosas, y por eso no debemos desanimarnos, el evangelio nos ofrece una vida prometedora y un futuro glorioso para aquellos que le creemos. 

Jesús le dijo en Juan 11: 40 ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?

No importa lo que el diablo te ha susurrado al oído, no importa como iniciaste… Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible. (Marcos 9:23) La vida que el evangelio nos ofrece es gloriosa porque tiene poder de restaurar la vida de los peores pecadores. 

La vida que el evangelio de Dios ofrece es gloriosa porque nada de este mundo puede opacarla. Cuántas vidas a lo largo de la historia han sufrido la injusticia de alguien o algo que los ha frustrado llenándolos de desilusión, tristeza, resentimientos y temores. Cuantas personas han visto los sueños de sus vidas fracasar en medio de la maldad que rodea este mundo. Pero la vida que ofrece el evangelio no es así, no hay maldad o ser que pueda destruir los planes de bendición que Dios tiene con nosotros. 

Para lograr permanecer en Su Gloria el Señor Jesús nos enseña lo siguiente:

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos”.

Jn 15:5-8

La clave de una vida gloriosa en el evangelio se encuentra en permanecer unidos a Cristo, el avivamiento está en el aire. Veremos COMO NUNCA ANTES la manifestación de los hijos de Dios.