Navidad: Esperanza, Fe Y Amor Muestra

“Vino para todos”

Cuando Dios vino a la Tierra, vino a la gente común. Cuando Jesucristo nació, él no vino a unos pocos elegidos. Él no vino a la clase privilegiada. Ni siquiera llegó a las personas religiosas. Él vino para la gente que no le importaba la religión. Llegó a humildes pastores. Él vino para todos nosotros.

La Biblia dice que cuando Jesús nació, no nació en un palacio, aunque él era el Dios del universo. Él ni siquiera había nacido en un buen hotel. Él ni siquiera había nacido en un hospital.  Y se habla de cómo Jesús nació en un pesebre. ¿Sabes lo que es un pesebre? Un pesebre es una caja de alimento para el ganado. Allí ponían el trigo y la avena y esas cosas. Allí el ganado metía la nariz, seguro que hasta la saliva se les salía. No es exactamente un lugar realmente limpio para dejar un bebé, mucho menos a un recién nacido. Sin embargo, ahí es donde Dios decidió nacer.

Cuando Dios vino a la Tierra, vino con el hedor de los animales. Tú no puedes conseguir nada más bajo para haber nacido que un establo.

Por otro lado, las primeras personas que llegaron a visitar a Jesús no eran los líderes religiosos. No eran de la realeza. No eran figuras políticas. Las primeras personas que fueron invitadas a ver a Jesús fueron los pastores.

Hoy día, hacemos a los pastores los héroes de la historia. Pero en aquellos días fueron pastores comunes. Ellos no eran nadie. Ellos se consideraban marginados de la sociedad, ya que hacían un trabajo que nadie más quería hacer. Fue un trabajo muy apestoso. En cuanto a la condición social se refiere, los pastores fueron el punto más bajo en la escala social. Fueron excluidos, rechazados. A ellos fue a quienesJesús invitó primero para llegar a su nacimiento.

Más tarde, los hombres sabios del oriente vinieron y trajeron ricos dones. Así, desde las más altas esferas de la sociedad hasta la menor, fueron invitados. 

Lo más precioso es que Jesús está disponible para todos nosotros. Él no nació en una colina apartada en la que no pudieran tener acceso a él y él tampoco nació en una comunidad cerrada. Nació a la intemperie donde cualquiera puede venir y tener una relación con él.

Ese es el punto. Dios quiere tener una relación contigo. Así que él baja a nuestro nivel, como dice Juan 1:14. Él no vivió en un palacio, a cierta distancia en la que no pudieran acercarse a él. Vivió entre nosotros. Me encanta esta traducción: “Jesús se hizo carne y sangre y se mudó al barrio.” Era un amigo del pueblo, uno de los hermanos en la comunidad. Era una persona normal.

¿Cuál es la buena noticia de esto? ¡Dios nos encuentra donde estemos! Tú puedes pensar: “Por todas las cosas que he hecho en mi vida, yo nunca podría tener una relación con Dios.” Estás equivocado. También puedes pensar: “Dios no se preocupa por mí, soy un don nadie. Nadie se preocupa por mí y Dios ciertamente no tiene tiempo para mí.” Estás equivocado. Totalmente equivocado. Dios dice: "Te quiero, te conozco, y quiero que me conozcas." ¿Estás preparado para el gran encuentro?