Supervivencia en El DesiertoMuestra

CONSEJO DE SUPERVIVENCIA # 6 — ENCUENTRE ALIMENTO

Encontrar una fuente de alimento en el desierto ayuda al superviviente a mantenerse con energía y enfoque. Como pueblo de Dios, sabemos que junto con el Espíritu, la Palabra de Dios es la esencia de la vida humana. Esta verdad es tan importante, que Dios guió a Su pueblo al desierto específicamente para enseñársela y que así descubrieran de la manera más profunda posible que confiar en la Palabra de Dios y obedecerla trae vida (Deuteronomio 8:2-3).

Primeramente, “vivir” por la Palabra significa nutrirse de su verdad hasta que se convierta en nuestra manera de pensar. La Palabra de Dios debe convertirse en nuestra cultura mental; una manera de pensar que ha sido transformada de lo natural a lo divino (Romanos 12:2). Esto significa que amoldamos nuestros patrones de pensamiento a la manera de pensar de Dios tal cual nos es revelada en las Escrituras. Leemos, estudiamos, meditamos, confesamos y memorizamos. Nos bombardeamos a nosotros mismos con la Palabra de Dios hasta que comienza a transformar los pliegues de nuestro cerebro y a hablarnos (Proverbios 6:20-22). Entonces, no estaremos tan solo leyendo la Palabra sino también viviendo por ella.

En segundo lugar, “vivir” por la Palabra significa obedecer la Palabra. La obediencia es especialmente importante en el desierto, porque es el momento en el que Dios nos prueba para ver si obedecemos. El autor de Hebreos advirtió acerca de la desobediencia a unos amigos cristianos que estaban pasando por un desierto espiritual (Hebreos 3:7-11). Les dijo: “¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que desobedecieron? Y vemos que no pudieron entrar a causa de incredulidad” (Hebreos 3:18-19). Fijémonos en que utilizó expresiones bastante duras para advertir a su iglesia acerca de la desobediencia en un desierto espiritual.