El Dios que RestauraMuestra

Él es digno de confianza

Lectura: Isaías 35

Devocional: Isaías 35:9-10 NVI

No habrá allí ningún león, ni bestia feroz que por él pase; ¡Allí no se les encontrará! ¡Por allí pasarán solamente los redimidos! Y volverán los rescatados por el Señor, y entrarán en Sión con cantos de alegría, coronados de una alegría eterna. Los alcanzarán la alegría y el regocijo, y se alejarán la tristeza y el gemido.

En el texto

Puede ser difícil leer pasajes de restauración o alabanza cuando estamos en medio de una época de sufrimiento. Puede parecer imposible regocijarse cuando nuestro dolor es abrumador. Sin embargo, esto es lo que Isaías hizo en su ministerio profético: animó al pueblo de Judá a regocijarse y alabar a Dios incluso cuando estaban sufriendo en medio de la destrucción.

Las palabras de Isaías nos recuerdan que debemos dirigir nuestro corazón a Dios y alabarle cuando estamos sufriendo. Este pasaje en particular fue escrito específicamente para el pueblo de Judá, advirtiéndoles de su pronta destrucción y alentándoles con esperanza de una futura restauración. Aunque no somos la audiencia original, este pasaje nos dice mucho acerca del carácter de Dios quien nos ama.

Nuestro Dios es Todopoderoso. Él fortalece a Su pueblo, y Él venga a quienes han sido explotados. Él hace a los sordos oír, a los ciegos ver, y a los cojos saltar. Nuestro Dios trae agua a una tierra estéril y crea un camino para que Su pueblo regrese. Él libera de la esclavitud, rescata a Su pueblo. Nuestro Dios los corona con gozo y los colma de alegría.

Puede que no estés en una época marcada por un gozo abrumador. Pero pase lo que pase, el carácter de Dios sigue siendo el mismo. Él aún es el Dios que restaura, cumple promesas, y te corona con gozo y felicidad. Puedes confiar en Él sin importar lo que tengas que afrontar. El Adviento nos recuerda el interminable gozo que tenemos en Cristo. No tenemos que temer, acobardarnos o escondernos cuando nos enfrentemos al sufrimiento. Por la gracia de Dios, podemos vivir gozosamente incluso en medio del dolor. Podemos proclamar Su bondad incluso cuando nuestro mundo pareciera desmoronarse.

Mientras concluyes tu tiempo devocional hoy en la Palabra de Dios, pídele a Él que te llene con Su gozo renovado. Él está contigo en lo que sea que estés enfrentando, y sabe exactamente qué consuelo necesitas. Acude a Él. Búscalo. Pídele. Él es el que hace un camino, y Él está haciendo un camino para ti hoy. Deja que Él te llene de gozo en esta temporada de espera.