Ve y DileMuestra

Fracaso del ministerio

Cuando era niño, disfrutaba escuchando sobre los increíbles viajes misioneros de San Pablo y los asombrosos éxitos que tuvo en una ciudad tras otra, plantando congregaciones a pesar de las feroces dificultades, reclutando y capacitando nuevos líderes y realizando milagros asombrosos.

Pero no todo fueron conchas marinas y globos. Así como el propio ministerio de Jesús produjo inicialmente más incrédulos que creyentes, Pablo también sufrió algunos reveses severos. "Y sus enseñanzas se extienden como gangrena. Entre ellos están Himeneo y Fileto, que se han desviado de la verdad. Andan diciendo que la resurrección ya tuvo lugar, y así trastornan la fe de algunos" (2 Timoteo 2:17,18).

Tu congregación probablemente tiene algunas grandes historias de triunfo y progreso. Pero también puede haber experimentado días de amargas decepciones. Las personas que pensabas que eran sólidas en la fe se alejaron o, peor aún, se quedaron y causaron divisiones en el grupo.

Estos contratiempos no significan que haya algo mal con el mensaje del Evangelio o algo mal contigo. Jesús predijo que estas cosas sucederían. Espéralos. Mantente en línea con la Palabra como tu fuente personal de verdad y tu fuente personal de fortaleza y deja que Dios resuelva el panorama general.