Triunfando en las PruebasMuestra
Buscando la paz en medio de la oposición
Lectura: 1 Pedro 3:8-14
EOAO: 1 Pedro 3:10-12
El que quiere amar la vida y ver días buenos, refrene su lengua de mal y sus labios de la mentira; apártese del mal y haga el bien; busque la paz y sígala. Pues los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones; pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal.
En el Texto
Desear amar nuestra vida y gozar de días felices no es una noción caprichosa, es una postura intencional de fe. Está arraigada en la idea de la soberanía de Dios sobre todas las cosas. En medio del caos y todos los retos que enfrentamos, debemos aferrarnos fuertemente a la promesa de que vienen días mejores para aquellos que conocen a Dios y lo aman.
Vivir así no es una postura pasiva. Implica velar activamente por las palabras que decimos a los demás y a nosotros mismos. Implica asegurarse de que hablemos con mucho cuidado. Nuestras palabras son capaces de edificar o derribar (Santiago 3:1-12). En estos versículos se nos recuerda que debemos elegir que nuestras palabras sean veraces y edificantes, no engañosas ni destructivas. Nuestras lenguas pueden ser nuestra mayor posesión o nuestro enemigo más feroz. Tanto la vida como la muerte se pueden encontrar en las palabras que hablamos (Proverbios 18:21).
Además, como seguidores de Cristo, estamos llamados a alejarnos del mal con determinación y a buscar el bien con fervor. Tenemos el encargo de buscar la paz, una paz que no es sinónimo de complacencia o silencio, sino una paz que busca la armonía y la unidad en la medida en que dependa de nosotros (Romanos 12:18). Reconocemos que, en este mundo quebrantado, la paz perfecta con todos puede no ser realista (Romanos 14:19), pero de todos modos nos esforzamos por lograrla.
Saber que Dios ve todo lo que pasamos es una de las mayores garantías cuando estamos siendo perseguidos o atravesando un momento difícil. Nada le es oculto. Sus ojos amorosos están sobre nosotros y escucha nuestras oraciones. En Su tiempo y a Su manera, la justicia prevalecerá. Mientras tanto, se nos recuerda orar por aquellos que nos hacen daño. La justicia debe ponerse en manos de Dios y no en las nuestras. Sabiendo que Dios lo ve todo, podemos confiarle el resultado. Los que hacen el mal no quedarán impunes.
En esta confianza encontramos libertad. Sabiendo que Dios tiene el control, podemos amar nuestras vidas, anticipar días buenos y confiar nuestros dolores y errores en sus amorosas y capaces manos.
Oración
Querido Señor Jesús, ayúdame a controlar mi lengua, a hablar vida y no hacer daño. Ayúdame a alejarme del mal y buscar activamente el bien y la paz en mi vida. En tiempos de persecución o dificultades, recuérdame que Tú lo ves todo y Tu justicia es perfecta. Ayúdame a confiar en Ti y como resultado a amar y orar por aquellos que me hacen daño. Amén
Escrituras
Acerca de este Plan
En Triunfando en las Pruebas estudiaremos Primera y Segunda de Pedro. Estas cartas siguen siendo tan relevantes hoy, y proporcionan una valiosa brújula para navegar por la vida en estos tiempos difíciles. Pedro anima a los primeros cristianos, y a nosotros, a mantenernos firmes en la Palabra de Dios.
More
Nos gustaría agradecer a Love God Greatly - Spanish por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://spanish.lovegodgreatly.com/