Siervos - Esperamos Al Rey Dando FrutoMuestra

La Biblia en el Nuevo Testamento nos habla de términos para hablar de la temporalidad, kronos y kairos. El Kronos es la forma lineal en que medimos el tiempo, el transcurrir del mismo. Pero pairos es lo que podeos llamar como “el tiempo en el reloj de Dios”.

Es la manera en que Dios se manifiesta en la historia. Dios tiene un programa histórico para la salvación y nos ha constituido como protagonistas del mismo.

DISCERNIR EL TIEMPO

Cuando los narradores bíblicos escriban la historia que tenemos en las Escrituras, no estaban pensando en escribir la historia como todavía hoy la concebimos, buscando datos exactos. Ellos no se preguntan: ¿Qué está pasando? Sino más bien: ¿Qué está haciendo Dios?

Dios es un Dios de cumplimientos y que lleva la historia a un fin.

Dios manifiesta etapas en la historia que tienen inicio y cumplimiento. Nuestra tarea como siervos es discernir esas etapas, entender los tiempos en que nos estamos moviendo

¿Te animas a discernir que está haciendo Dios hoy? Algunos piensan que es es muy pretencioso, sin embargo, la Biblia nos desafía constantemente a hacerlo.

Discernir es observar la realidad no en su superficialidad sino con la profundidad suficiente como para notar el obrar de Dios y como Él se nos está revelando.

Dios dice que hace nuevas todas las cosas. ¿Puede ver que Dios está haciendo cosas nuevas?

DISCERNIR LAS PRUEBAS

En nuestra vida cotidiana podemos distinguir días buenos y malos. Los días de pruebas nos ayudan a madurar. Nadie que no sea llamado a algo importante evitará pasar por pruebas. Las pruebas son necesarias y debes saber discernirlas.

Dios no te prueba porque Él no sepa algo de tu vida, lo hace para que se te revele a tu propia vida tu estado espiritual.

Muchas de las temporadas de prueba o problemas, son la antesala de algo nuevo que Dios está haciendo y debes saber discernirla.

HONRAR EL TIEMPO

Jesús nos cuenta en Mateo 25 la parábola de los talentos. Lo mismo en la parábola de las 10 vírgenes. En estas nos invita a vivir dando fruto, transitar la parte de la historia de Dios que nos toca protagonizar con la plena consciencia de que servimos a un Rey que merece que demos fruto.

Nuestro Señor es glorificado en esto.

"Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos" (Juan 15:4-8).

No lo olvides, somos SIERVOS, estamos esperando al REY dando FRUTO.